Status ontológico del pensamiento humano
Reflexiones de GG
Paris, 16 de Julio de 2014
Estas reflexiones las
hago a partir de mi correspondencia reciente con Luis Razetto sobre la pareja
de conceptos “en potencia” y “en acto”, y desde la perspectiva del
emergentismo.
Uno de los grandes
hitos del “desarrollo” (llamémoslo así)
de la Tierra (Gaia?) es el surgimiento del pensamiento humano. Podría decir
simplemente “del pensamiento”, pero ocurre que sólo tenemos evidencia de su
existencia en seres humanos que viven en sociedades humanas.
El PH es como es
gracias a (1) el desarrollo evolutivo del cerebro –lo que nos permite sospechar
que existen formas de pensamiento pre o para-humanas en otras especies—, (2) a
la capacidad de hablar –expresarse, comunicarse-- con lenguaje articulado, y (3) nuestro vivir
en sociedad. En tiempos relativamente
recientes el PH se ha potenciado gracias a la invención de tecnologías que
permiten su registro independiente de la memoria individual, como ha sido la
escritura primero y luego la imprenta. En las últimas décadas la posibilidad de
registros electrónicos y los avances en las tecnologías de la comunicación, de
Internet en particular, han potenciado tremendamente la posibilidad de conocer
el pensamiento de otros y de colectivizar de alguna manera el proceso de
pensamiento humano.
En la medida en que
se registra en objetos con existencia propia, como pueden ser el obelisco de la
Etoile, o un libro o un CD, el PH pareciera independizarse de sus creadores y
llegar a tener existencia propia. Así, si ocurriera un cambio climático o una
super epidemia que tuviera por consecuencia la desaparición de todos los seres
humanos de la Tierra, el obelisco seguiría ahí con sus jeroglíficos egipcios,
igual que el libro en la biblioteca desierta y que el CD. Me parece, no obstante,
que si bien el portador material del mensaje permanecería, el mensaje mismo
carecería de significado al no existir seres humanos que puedan leerlo,
escucharlo o decodificarlo.
Por tanto, si bien un
pensamiento particular al ser comunicado trasciende al individuo que lo
concibe, dicho pensamiento no persiste sin comunidad humana que lo cobije y
perpetúe. Carece, por tanto, de
independencia o autonomía ontológica; no existe en sí, sino siempre es para
alguien que lo piensa o recuerda. ¿Cuál es entonces su estatus ontológico?
Podríamos llamarlo algo así como un epi-fenómeno humano-dependiente.
A partir de la
experiencia del PH, ¿qué condiciones deberían darse para que un fenómeno
semejante ocurriera en otros seres? Las tres condiciones que mencioné antes deberían darse: desarrollo del
sistema nervioso o equivalente; capacidad de comunicarse entre individuos
mediante un lenguaje con significados y capaz de transmitir conceptos
abstractos, y sociedad de individuos que interactúan entre sí y acumulan y
transmiten colectivamente su pensamiento.
La existencia de un alma espiritual,
capaz de sobrevivir a la muerte corporal y de pensar por sí misma sin el
soporte del cerebro no tiene apoyo empírico alguno y podría ser considerada
absurda.
Cuando decimos que la
conciencia emerge en estadios avanzados de la evolución de la vida en la
Tierra, nos referimos a la experiencia yoica
……
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